Se analizan las reacciones de los consumidores a una idea de marketing antes que se convierta en un producto.
Está finalizado a un análisis detallado para la reconstrucción del significado percibido por los consumidores.
Se examina la idea de producto o servicio en el plan:
Cognitivo - comprensión, aceptación, agradecimiento, pertinencia, relevancia.
Simbólico - principales valores de consumo y significados emocionales que se les atribuyen.
Analiza el nombre en sus aspectos evocadores, afectivos, simbólicos.
Se comprueba la pertinencia con el posicionamiento deseado o con su imagen pre-existente, si se trata de un producto ya en el mercado.
Se examina el embalaje del producto y las posibles alternativas.
Se consideran los aspectos perceptivos y los códigos expresivos, su integración y la capacidad de conferir carácter distintivo al producto en tema de categoría de colocación elegida.
Investigación para verificar el grado de aceptación (Me gusta-No me gusta) de un producto entre los consumidores.
Se evalúa la reacción de los consumidores al rendimento del producto en condiciones de uso normales.
Medición de la satisfacción del cliente.
La satisfacción se entiende como estado psicológico que llega de un gap entre la valuación de la experiencia de consumo ocurrida y las expectativas de los consumidores acerca de esta experiencia.
Por lo tanto, la satisfacción es el resultado de la comparación de 2 variables:
1) las expectativas con las que el cliente se acerca al tipo de producto / servicio;
2) la percepción del producto / servicio después del consumo / uso.
